Los que sois de nuestra generación seguro que en alguna ocasión os habéis venido arriba en alguna discoteca o fiesta que se precie realizando uno de estos tres bailes míticos:
A) El popurrí de Grease
B) Saturday Night (sí hombre, la que empieza con Diridarara)
C) El baile que se marcan John Travolta y Uma Thurman en Pulp Fiction.
Cuando veáis las fotos de esta boda, entenderéis que Melissa y Javi demostraran que han bailado la opción C en más de una ocasión. Fans del universo Tarantino, tenían muy claro que los principales personajes de sus películas tenían que darse cita en la "NO" boda que organizaron en una casa rural de Navaluenga (Ávila), que buscamos y decoramos para la ocasión. Una celebración informal -la boda "real" ya la habían realizado con la familia unas semanas antes- en la que reunir a todos sus amigos sin que éstos sintieran la presión de que se trataba de un gran día. Como toda buena boda que se precie, lo sea más o menos, hubo algunos detalles que no pudieron faltar, como un buen banquete, un photocall divertido y diversión, mucha diversión. Se les organizó una paellada para comer, juegos y un futbolín por la tarde y, ya por la noche, la transformación que convirtió el lugar en una pasarela de Vincents Vega, Mias Wallace, Sres. Lobo y demás personajes vinculados al excéntrico director de cine.
El puestecito de hamburguesas (con los nombres de las delicatessen de Pulp Fiction), las palomitas en las mesas, la iluminación y la decoración de la discoteca, con posters de sus películas, ambientaron la noche para que todos ellos se lo pasaran en grande. Y lo hicieron, pues damos fe que a altas horas de la madrugada todavía les oíamos cantar desde la habitación... ¡Un placer montar algo tan original chicos!
Melissa and Javi love Quentin Tarantino films, so it was obvious that their main characters would appear in their wedding celebrated in Navaluenga, Ávila. They wanted something informal, just for a few friends (the big celebration with their families had taken place some weeks before), so we searched a house specially for that kind of party. They ate paella for lunch, played some games during the afternoon, took some baths at the swimming pool and then, in the evening, disguised in Tarantino's characters to enjoy a night devoted to his universe. Hamburguers, lights and a photocall did the rest. We can assure they partied all night long!
Decorar una boda con esmero es esencial, y las lámparas añaden encanto. Su luz suave y cálida crea ambientes mágicos, realzando cada detalle y tejido de emociones, convirtiendo momentos en memorias eternas.
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